La princesa Yona vive una vida de lujo y tranquilidad, completamente protegida de los problemas del aparentemente pacífico Reino de Kouka; sin embargo, el repentino asesinato del rey y la traición de su amada prima Su-won ponen la vida de Yona en peligro mortal. Obligada a escapar solo con Son Hak, quien es su amiga de la infancia y su guardaespaldas, la ingenua princesa pronto descubre que Kouka no es el lugar idílico que imaginó que sería. La pobreza, la lucha y la corrupción son desenfrenadas, por lo que reclamar el trono no es más que una ilusión, dado el estado actual del reino.
