Hajime Aono solía vivir para el sonido de su violín. Desde que era joven, había admirado a su padre, un violinista de renombre mundial, quien lo inspiró a elegir él mismo el instrumento. Pero luego del amargo divorcio de sus padres, Aono jura no volver a jugar nunca más y se dirige a la escuela secundaria sin una dirección o perspectiva. Durante una clase de educación física, el poco atlético Aono es golpeado en la cara con una pelota y termina en la enfermería. Allí, conoce a la descarada Ritsuko Akine, quien comienza a tocar el violín en la habitación, creyendo que está sola. Sin embargo, después de un incidente pasado, ha habido rumores que afirman que Akine es una acosadora, lo que la ha aislado de sus compañeros, un hecho que Aono no conocía. Akine sueña con inscribirse en una escuela con una orquesta, pero su forma de tocar amateur y su falta de conocimiento musical irritan enormemente a Aono. Al ver esto como una oportunidad perfecta para que los dos se hagan amigos, su maestro sugiere que Aono le enseñe a Akine a tocar el violín, algo en lo que Aono se opone con vehemencia. Sin embargo, a medida que la pareja pasa más tiempo juntos, pronto aprenden a entenderse y ayudarse mutuamente, y Aono finalmente puede descubrir la pasión y la melodía perdidas en su vida.